La impactante pérdida fue impulsada por el desarme de posiciones en pesos de Toyota. Expertos alertan sobre un posible efecto contagio en otras empresas y un deterioro acelerado de las reservas.
El Banco Central enfrentó este jueves una caída de USD 600 millones en sus reservas, marcando el peor resultado diario en lo que va del gobierno de Javier Milei. Este retroceso ocurre en un contexto de presión cambiaria y expectativas devaluatorias que golpean la economía.
La automotriz Toyota fue la principal protagonista de la jornada, al solicitar USD 780 millones para cubrir pagos de importaciones, desarmando su estrategia de «carry trade». Durante meses, la empresa había postergado sus obligaciones en dólares para beneficiarse de las tasas en pesos, pero el reciente repunte del dólar volvió insostenible esta práctica. Este movimiento genera inquietud en el mercado, ya que podría ser imitado por otras grandes compañías.
En paralelo, el equipo económico liderado por Toto Caputo continúa utilizando unos USD 200 millones diarios para estabilizar el dólar blue y el MEP, alejando al Gobierno de la meta de acumulación de reservas acordada con el FMI. Al 18 de diciembre, las reservas netas del Banco Central se encontraban en USD -9.770 millones, prácticamente en el mismo nivel negativo que dejó la gestión de Sergio Massa. Expertos advierten que el deterioro de las reservas y los cambios en las expectativas del mercado podrían acelerar una crisis cambiaria en las próximas semanas.