Los gobernadores marcaron diferencias con la Casa Rosada por las retenciones y el apoyo de Donald Trump al Presidente. Desde Provincias Unidas buscan consolidar un nuevo polo político con eje en la producción y el federalismo.
Los gobernadores de Córdoba y Santa Fe, Martín Llaryora y Maximiliano Pullaro, junto al ex mandatario cordobés Juan Schiaretti, elevaron el tono de confrontación con el presidente Javier Milei en medio de la campaña electoral. Los dirigentes cuestionaron la baja transitoria de retenciones y criticaron la búsqueda de respaldo financiero en Estados Unidos, al tiempo que plantearon la necesidad de una alternativa federal.
El ministro cordobés y el santafesino remarcaron que la eliminación de retenciones debía ser definitiva y no utilizada con fines coyunturales. Pullaro afirmó que esas medidas “no pueden servir para sostener el tipo de cambio ni para financiar fuga de capitales”. Schiaretti, en tanto, aseguró que el pedido de ayuda a Donald Trump muestra “el fracaso del programa económico” y lanzó en Rosario la construcción del espacio Provincias Unidas como tercera opción electoral.
El bloque opositor sumó también críticas por la falta de fondos coparticipables y por los ajustes que, según señalaron, cargaron sobre las provincias. Llaryora y Pullaro recordaron la quita del fondo compensador del transporte y las dificultades para sostener obras. Con la mira en las elecciones del 26 de octubre, Schiaretti advirtió que un triunfo en Córdoba daría a Provincias Unidas el impulso necesario para consolidar un bloque legislativo propio y proyectarse hacia 2027 con un candidato presidencial.






