El Presidente cerró un fin de semana de definiciones políticas con el nombramiento de Diego Santilli, tras la salida de Guillermo Francos y la designación de Manuel Adorni. La nueva etapa del Gobierno busca combinar gestión política y estrategia libertaria.
Durante 48 horas de negociaciones y movimientos internos, el presidente Javier Milei definió la nueva estructura de su Gobierno y despejó la incógnita sobre la conducción política del Ejecutivo. La renuncia de Guillermo Francos a la Jefatura de Gabinete y la designación inmediata de Manuel Adorni fortalecieron a Karina Milei, quien quedó con la firma final de las decisiones presidenciales. El domingo, Milei completó el armado con la incorporación de Diego Santilli al Ministerio del Interior, decisión que reordenó el equilibrio de poder con la influencia de Santiago Caputo, asesor político y estratega principal.
El Presidente y Caputo mantuvieron una reunión privada en la Quinta de Olivos antes de definir el nombramiento. Santilli recibió el llamado de Milei esa misma tarde, mientras regresaba desde Paraná, y aceptó el cargo de inmediato. Su llegada representa una señal al PRO y al propio Mauricio Macri, en medio de tensiones recientes por el rumbo del Gabinete. En paralelo, el nuevo canciller Pablo Quirno también consolidó vínculos con los dos principales ejes de poder interno —Karina Milei y Caputo—, garantizando una estructura sin desequilibrios.
Fuentes oficiales destacaron que Santilli asumirá la tarea de coordinar el diálogo con gobernadores y legisladores para asegurar el avance de las reformas previstas en el Congreso. Durante su encuentro con Milei en Olivos, el mandatario le entregó las notas base del Pacto de Mayo, que prevé reducción del gasto público al 25% del PBI, modernización laboral y ajuste fiscal. En paralelo, el Gobierno anticipó nuevas designaciones en Seguridad y Defensa, donde se perfilan Alejandra Monteoliva y Luciana Carrasco como reemplazos de Patricia Bullrich y Luis Petri.
Con estas decisiones, Milei consolidó un Gabinete más político y alineado a su núcleo de confianza, donde Karina Milei concentrará la gestión administrativa y Santiago Caputo mantendrá el control de la estrategia. En el entorno presidencial aseguran que la estructura quedó definida y que, por ahora, no habrá más cambios.






